Formación Geológica

Si queremos remontarnos al desmembramiento de los continentes y a la formación de las islas y los mares, deberemos retroceder hasta los períodos geológicos del Cretácico (entre los 144 y los 66 millones de años) al del Eocenio (entre los 56 y los 34 millones de años), época en la que Europa se separa sucesivamente de África y América, produciéndose a continuación la emergencia de las islas atlánticas, para tener alguna referencia de la formación de la primera de las islas de este archipiélago, Maio, la única con afloramientos sedimentarios, seguida de la aparición de las demás, en la falla geológica conocida como Vema, que se prolonga por el Cañón de Cayar, hasta Dakar.

Conviene evocar el mítico escenario de la Atlántida, para situarnos en este archipiélago que emerge de profundidades de más de 4.000 metros, en la concha abierta al Oeste, que separa las islas de Barlovento de las de Sotavento, el más meridional de los cuatro que componen la Macronesia, con Canarias al Norte, seguida de Madeira y Porto Santo (ambas a la altura de Marruecos), más al Norte aún, y de las Azores (junto al Portugal Continental), componiendo un total de 28 islas y diversos islotes, entre ellas las Selvagens, 165 km al Norte de Canarias, pero formando parte del archipiélago de Madeira.

Si queremos remontarnos al desmembramiento de los continentes y a la formación de las islas y los mares, deberemos retroceder hasta los períodos geológicos del Cretácico (entre los 144 y los 66 millones de años) al del Eocenio (entre los 56 y los 34 millones de años), época en la que Europa se separa sucesivamente de África y América, produciéndose a continuación la emergencia de las islas atlánticas, para tener alguna referencia de la formación de la primera de las islas de este archipiélago, Maio, la única con afloramientos sedimentarios, seguida de la aparición de las demás, en la falla geológica conocida como Vema, que se prolonga por el Cañón de Cayar, hasta Dakar.

Conviene evocar el mítico escenario de la Atlántida, para situarnos en este archipiélago que emerge de profundidades de más de 4.000 metros, en la concha abierta al Oeste, que separa las islas de Barlovento de las de Sotavento, el más meridional de los cuatro que componen la Macronesia, con Canarias al Norte, seguida de Madeira y Porto Santo (ambas a la altura de Marruecos), más al Norte aún, y de las Azores (junto al Portugal Continental), componiendo un total de 28 islas y diversos islotes, entre ellas las Selvagens, 165 km al Norte de Canarias, pero formando parte del archipiélago de Madeira.

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